Ay sí, seguro tu hermano es un santo y nunca te ha hecho nada malo. Viven súper felices y las pocas veces en que no están de acuerdo, basta un breve y agradable diálogo para ponerse de acuerdo. Sí, cómo no.
Te creo más que se pelean y que hay momentos en que no se soportan. Pero espérate a ver lo que le hace Edgardo a Rafael, dos hermanos que aparecen en el cuento El código del payaso, incluido en el más reciente libro de Carlos Velázquez, El menonita zen.
Edgardo está peor que la canción de Pedro qué gusto de verte, supe que eras licenciado, ya sabes esa canción de los Tigres del Norte en que Pablo regresa de Estados Unidos donde estuvo trabajando para mandarle dinero a su hermano para que estudiara y se encuentra con que el Pedro le quitó a su novia.
De niños, Edgardo le quita las mascotas, los amigos, casi las ganas de vivir; y de grande le quita la esposa y se burla hasta cansarse de que Rafael se convierte en payaso para poder enfrentar la vida.
Desde uno de sus primeros libros, La marrana negra de la literatura rosa, Carlos Velázquez ha creado personajes con un súper poder. No se arrepienten de nada.
Puede ser un gay de clóset que achaca a su marrana negra la autoría de unas novelas rosas, una banda de punk que explota a un niño con síndrome de Down, una que logra que su novio fit se convierta en un gordo, porque es adicta a las personas con sobrepeso y otra que hace que su gordo adelgace, además de un hombre que se une a un club de embarazadas para jugar a la mamá y una persona de baja estatura que quiere vender boletos para ver a un menonita que levita.
Platiqué con Carlos Velázquez, el autor de La biblia vaquera, La marrana negra de la literatura rosa, El pericazo sarniento y El menonita zen, entre otros, y lo puedes escuchar en este episodio del podcast.
Share this post